Los 10 efectos del coronavirus en la navegación marítima
La industria naviera, que transporta el 90% de las mercancías en todo el mundo y desempeña un papel clave en la economía mundial, ya se ha visto afectada. Ciertamente, los próximos meses van a ser críticos no sólo para el transporte marítimo, sino para toda la economía y el comercio. Este artículo, adaptación del original publicado en el portal ‘Safety4sea’, ofrece 10 claves que ha de tener en cuenta el sector marítimo como consecuencia del Coivd-19.
1) Retrasos en los cambios de tripulación
Los cambios de tripulación pueden sufrir retrasos considerables debido a las restricciones de viaje en los diferentes países. Pueden surgir problemas no sólo para la gente de mar que viaja desde determinados países de origen (por ejemplo, una ciudad de origen en un encierro), sino también para toda la gente de mar que utiliza como países de tránsito zonas que se han visto afectadas por el virus y que también pueden enfrentarse a una posible cuarentena a su llegada.
En la medida de lo posible, los operadores deberían tratar de evitar los cambios de tripulación en los países afectados y utilizar vuelos directos para evitar restricciones adicionales en los países de llegada. El permiso para bajar a tierra es algo que debe considerarse, en el mismo contexto. En los países afectados tal vez sea preferible suspender el permiso en tierra a fin de evitar nuevas consecuencias de carácter grave.
2) Repatriación de la gente de mar
La mayoría de las restricciones mencionadas son aplicables también a esta cuestión. Pueden surgir dificultades en caso de que un marino, después de desembarcar para su repatriación, sea puesto en cuarentena en el aeropuerto por cualquier motivo. Los agentes locales deberían prestar plena asistencia para garantizar que estos marinos salgan finalmente hacia su destino final.
3) Tratamiento médico de los casos sospechosos a bordo
Este es uno de los problemas más difíciles de enfrentar. Los casos sospechosos a bordo deben ser tratados de acuerdo con un plan de contingencia eficaz covid-19. Las asistencias médicas a bordo deben ser enriquecidas con cantidades adicionales de artículos médicos relacionados (medicamentos para la fiebre y el dolor, solución de lactato de sodio, frotador de manos a base de alcohol, cloro, máscaras faciales, guantes de mano, etc.).
Se determinarán espacios de aislamiento para mantener el número de marinos afectados lo más bajo posible. El traslado de los casos a tierra también es un desafío, ya que muchos países pueden no aceptar a la gente de mar afectada o, si finalmente la hospitalizan, habrá que pagar tasas adicionales para el tratamiento.
4) Asistencia a bordo para certificación y fines estatutarios
Puede ser un reto importante, especialmente en el caso de la certificación, ya que puede haber problemas relacionados con el transporte de personal (por ejemplo, superintendentes, inspectores, oficiales de investigación, inspectores de clase/clubes que visitan los buques, etc.). Se debe programar un arreglo adecuado para todas las actividades afectadas (cambio de tripulación, auditorías, inspecciones, etc.). Cuando sea necesario, se debe mantener una discusión adecuada con la clase, la bandera y otras partes involucradas.
5) Operaciones de carga
Puede haber problemas de puerto/terminal, ya que puede estar cerrado para las operaciones y, por consiguiente, pueden producirse demoras. Esto puede afectar al calendario de operaciones o a la propia carga (en caso de que ésta se vea afectada por las condiciones ambientales). Probablemente las cuestiones más importantes se plantearán a los operadores de contenedores, ya que se alterará el calendario de los contenedores tanto cargados como vacíos.
Pueden surgir problemas adicionales en caso de que la operación esté sujeta a la presencia humana (por ejemplo, estibadores, técnicos en tierra, etc.), lo que aumenta la posibilidad de afección. Medidas incluidas en un plan de contingencia covid-19 que se aplicará en caso de presencia de personal de la terminal a bordo. Para los administradores de contenedores puede ser eficaz un reprogramamiento de las operaciones iniciales a fin de evitar demoras o costos adicionales por la reorganización de los contenedores a bordo.
En muchos casos, también se han producido importantes demoras y/o cuarentenas debido al histograma de viaje del buque en los últimos 15 a 30 días por haber hecho varias escalas de alto riesgo.
6) Bunkering
Esas operaciones se verán mínimamente afectadas por la situación en curso, ya que no es necesario que la conducta se lleve a cabo cara a cara y a corta distancia durante la operación. El uso de EPP apropiados durante la conexión/desconexión de las mangueras y el manejo de la documentación entre la tripulación y el proveedor del búnker deberían proteger la propagación de cualquier tipo de enfermedad.
7) Tiendas, suministros, repuestos
Todas las inspecciones y procedimientos de suministro se centran, por el momento, en la conformidad de la cantidad y la calidad de los artículos recibidos. Como estos artículos pueden estar sujetos a infección, esto puede causar problemas a los barcos. Pueden surgir problemas adicionales si las instalaciones portuarias o los proveedores de los almacenes se niegan a suministrar los artículos necesarios debido a las restricciones comerciales locales por las medidas para contrarrestar la afección del virus. Una vez más, una buena planificación y programación del almacenamiento y el suministro podría ser una solución. Por consiguiente, se debe informar a los operadores de todas las restricciones antes de emprender esas operaciones.
8) Retrasos debido a la escasez de pilotos o a la negativa a embarcar
Hay dos aspectos de esta cuestión. Uno es el reducido número de pilotos disponibles debido a la infección por el virus y el otro es la negativa del piloto a subir a bordo del buque debido a su anterior horario portuario (visitando puertos de los países afectados). Ambas cuestiones son importantes y pueden causar retrasos o cambios en el horario del buque.
Sin embargo, los operadores, durante la etapa de planificación del viaje, deben asegurarse, a través de los agentes locales, de que el piloto estará disponible a la llegada del buque y de conformidad con las reglamentaciones portuarias. Las demoras adicionales debidas a esas causas deben documentarse para su utilización futura.
9) Reparaciones
Los buques que ya están en reparación o dentro de los astilleros probablemente se enfrenten a problemas debido a las restricciones de trabajo desde la costa. Esto conducirá a retrasos en los plazos previstos y en los futuros contratos de los buques. Los operadores deberían obtener cualquier tipo de garantía de los astilleros (o de las instalaciones de reciclaje) sobre los plazos y las pruebas documentadas de que las demoras no son causadas por el lado del buque.
10) Seguros
Este es un parámetro totalmente desconocido. No hay primas disponibles en el mercado debido a la naturaleza repentina e incierta del brote y no puede haber una diligencia debida apropiada para predecir qué tipo de desafíos pueden enfrentarse en cualquier momento debido a la naturaleza rápidamente cambiante de la situación. Esto también es aplicable a las cláusulas incluidas en los contratos de fletamento pertinentes. ¿Quién cubrirá esos gastos, como en la mayoría de los casos, cuando se trata de un buque? Hasta ahora no hay respuestas específicas a esas preguntas y sigue habiendo incertidumbre.
Fuente : El Naucher