NACIONALES

Agroexportadoras peruanas evalúan estrategias ante aranceles agrícolas del gobierno de EE.UU.

Las agroexportadoras peruanas empiezan sus planes de diversificación de mercados y ajuste de costos ante las políticas arancelarias agrícolas de Estados Unidos.

La imposición de aranceles a los productos agrícolas que ingresan a Estados Unidos, tendrá un impacto diferenciado en la industria agroexportadora peruana. En línea con ello, las empresas del sector están barajando alternativas para adelantarse a la entrada en vigencia a partir del próximo 2 de abril.

En general, la medida generará un alza de precios a los consumidores finales en el mercado estadounidense, acota el CEO de Fluctuante, David Sandoval. El efecto inflacionario afectaría la demanda en EE.UU, que es el principal mercado de exportación de los productores locales (ver gráfico), y generaría menos órdenes de compra.

Adicionalmente, asoma como riesgo que el gobierno de Donald Trump disponga excepciones en la aplicación de la medida, sobre todo para sus principales países proveedores de frutas y hortalizas, que son México y Canadá. “Nos podría sacar del mercado, como pasó con el acero”, advierte el gerente de estudios económicos de ComexPerú, Rafael Zacnich.

Algunas agroexportadoras ven un riesgo bajo y continuarán sus inversiones en optimización operativa y recambio varietal de arándanos, pues existe una complementariedad estacional entre las cosechas entre EE.UU. y el Perú. “Cuando empieza a disminuir su campaña, nosotros arrancamos. Les conviene que haya disponibilidad de fruta las 52 semanas del año”, dice el CEO de Cerro Prieto, Percy Muente.

Sin embargo, otras empresas como Agrícola Pampa Baja sí buscarán diversificar el riesgo y apuntarán a otros mercados. Su meta es disminuir la participación de los envíos de uva de mesa a EE.UU. de 80% a 70%, e incrementar la de Asia en 20%, explica su director, Juan Carlos Paredes.

Agroindustrial Beta aún observa el escenario y evaluará si asume el costo del arancel. “Si el mercado aguanta el precio ‘normal’ sumado al arancel, es ideal. Si no es así, vamos a asumir parte del mayor costo”, explica su gerente de Administración y Finanzas, Raúl Briceño.

Finalmente, empresas de menor magnitud productiva sí han paralizado su expansión de zonas de cultivo. Es el caso de Uvica. “Mi utilidad es 5% a 8%. Si tengo que asumir, por ejemplo, un 30% adicional, no puedo vender”, explica su gerente general, Dario Nuñez.

@SemanaEconomica

Obtenga las ultimas noticias de APAM