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Puerto de Iquique resistirá terremotos de hasta de 10 grados Richter

Reconstrucción de la infraestructura incorpora tecnología antisísmica.

Durante la visita del subsecretario de Transportes Carlos Melo, al puerto de Iquique, en la que observó la que inspeccionó los avances de la segunda etapa de reconstrucción, se le dio especial énfasis a la tecnología que se incorporará a la obra al transformarlo en un puerto antisísmico. Cabe recordar que este proceso responde a los daños sufridos por el puerto en los terremotos del 1 y 2 de abril del año 2014, cuando la intensidad de los movimientos telúricos, bordeó los 8 grados Richter.

Al respecto, Claudio Agostini, presidente de la Empresa Portuaria de Iquique (EPI), dijo que, desde ahora, el puerto sería capaz de resistir un terremoto de hasta 10 grados. “Debemos tomar conciencia del grado del daño que sufrió este terminal, y eso pasa al mirar la curvatura con la que quedó, que es más fuerte que una imagen o una noticia que aparece por todos lados, hablando del terremoto. Estando aquí, puedes visualizar de mejor forma lo que pasó, la gravedad del daño real”.

Por su parte, el subsecretario Carlos Melo, aseveró que la decisión de hacerlo antisísmico, obedece a evitar nuevas tragedias como la anteriormente sucedida. Sin embargo, explicó que “este tipo de situaciones, así como la problemática que podría suceder ante un nuevo movimiento telúrico, como el deslizamiento de los contenedores hacia la ciudad, es algo que debe tratarse con la mitigación y no con la prevención, porque la forma que tiene Iquique, obliga a que los contenedores, deban ser acopiados en el mismo recinto y no en otra parte de la ciudad, debemos aprender a convivir con este tipo de situaciones”.

Añadió que, ante estos casos, hay que crear planes específicos para lidiar con el asunto y no buscar evitarlos, porque no es posible.

En el mismo contexto, Alfredo Leiton, gerente general de EPI, explicó que esta es una ventaja competitiva, ya que la protección de agua tiene excelentes medidas, lo que permitiría que ante movimientos fuertes de agua, se podrá seguir operando. “El estudio de maniobrabilidad, nos dice que podremos seguir operando aunque existan marejadas, por la buena protección que tendremos”.

El molo 1 del puerto iquiqueño, quedó con grietas de hasta 1,5 m de abertura, después de los terremotos grados 8,2 y 7,9 en escala de que afectaron a la región de Tarapacá el año 2014.

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