AIE: Demanda de petróleo cae pero los precios altos persisten
Las estimaciones más bajas de crecimiento del FMI, las disputas comerciales y la presión de los precios altos del petróleo contribuyeron a la rebaja con relación al consumo, dijo la AIE.
La Agencia Internacional de la Energía (AIE) rebajó los pronósticos de demanda de petróleo para este año y el próximo debido a las crecientes amenazas al crecimiento económico mundial, pero advirtió que los menores suministros sobrantes de petróleo mantendrán elevados los precios.
Las estimaciones más bajas de crecimiento del Fondo Monetario Internacional, las disputas comerciales y la presión de los precios altos del petróleo contribuyeron a la rebaja con relación al consumo, dijo la AIE con sede en París en su informe mensual.
No obstante, dado que en Venezuela e Irán, ambos miembros de la OPEP, las reducciones de la oferta se profundizan, el nivel de capacidad de producción sobrante que queda en otros lugares asciende sólo a 2% de la demanda global y es probable que se contraiga aún más, dijo.
“Volvió la energía cara” y “plantea una amenaza para el crecimiento económico”, dijo la AIE, que asesora a la mayoría de las grandes economías. El organismo señala que, en el caso de muchos países en desarrollo, los precios internacionales más altos coinciden con monedas que se deprecian frente al dólar estadounidense, lo cual agudiza el perjuicio económico.
El barril de petróleo trepó a un máximo de cuatro años por encima de los US$ 85 en Londres la semana pasada debido al temor de que las sanciones estadounidenses contra las exportaciones iraníes de crudo generen escasez de oferta en los mercados en lo que queda de este año. Posteriormente los precios retrocedieron en tanto la atención se trasladó a las amenazas para la demanda planteadas por economías emergentes vacilantes y la disputa comercial EE.UU.-China.
La AIE rebajó su estimación de crecimiento de la demanda mundial de petróleo tanto para el 2018 como para el 2019 unos 110,000 barriles diarios hasta 1.3 millones y 1.4 millones de barriles diarios respectivamente. Esta revisión también reflejó los cambios en la forma en que el organismo evalúa el consumo chino. Por primera vez, la demanda y la oferta mundiales están cerca de alcanzar los 100 millones de barriles diarios.
Fatih Birol, director ejecutivo de la AIE, dijo en entrevista con Bloomberg esta semana que los precios “están ingresando en la zona roja” que indica un peligro para el consumo, y exhortó a los miembros de la OPEP con oferta sobrante a aumentar la producción.
El último informe reveló que Arabia Saudita y otras naciones clave de la Organización de Países Exportadores de Petróleo ya están produciendo para compensar a otros miembros –en particular Irán y Venezuela- que están experimentando disminuciones. El reporte mostró que los productores de la coalición llamada OPEP+, que también incluye a Rusia, sumaron 1.6 millones de barriles diarios desde mayo.
Por consiguiente, se reabastecieron las existencias y parecería “que el mercado petrolero está adecuadamente aprovisionado por ahora”, dijo la agencia.
De todos modos, la AIE también reconoció que los esfuerzos de los productores han agotado considerablemente la cantidad de oferta sobrante que se reserva para disrupciones y emergencias y es mantenida mayormente por Arabia Saudita. Si bien la agencia estima que el reino podría aumentarla un 12%, no está claro cuánto tiempo llevaría hacerlo o cómo se sostendría.
La cantidad disponible se verá puesta a prueba casi seguro en los próximos meses cuando entren en vigor las sanciones estadounidenses contra Irán, que ya experimentó una caída de los suministros al nivel más bajo en dos años, según el reporte. Las exportaciones iraníes se desplomaron un 26% a 1.8 millones de barriles diarios.
“Esta tensión podría persistir cierto tiempo y probablemente se verá acompañada de precios más altos, por mucho desagrado que nos causen tanto ellos como su impacto potencial en la economía global”, dijo.