Contraloría: nuevo control de proyectos reduciría pedidos de sobornos a empresas
El nuevo control de proyectos que aplicará la Contraloría reduciría la corrupción en las licitaciones y mejoraría tiempos de ejecución de las obras.
El control de proyectos que ejercerá la Contraloría de la República a nivel nacional a partir de este año limitaría la exigencia de sobornos a las empresas para que accedan a licitaciones. También se acelerará el trabajo de la Contraloría, lo que evitará sobrecostos en la ejecución.
La semana pasada, la Contraloría publicó los lineamientos que guiarán este control. En ellos se identifican 246 “megaproyectos” que serán controlados. Al tratarse de un número elevado de proyectos, se distribuirá su control entre el 2018 y el 2024. A la fecha está pendiente que la Contraloría establezca qué proyectos priorizará este año.
Se está implementando un plan integral de control que permitirá el seguimiento en todas las fases de los proyectos fiscalizados (llamado control concurrente). Habrá hitos de control comunes a cada modalidad de ejecución de proyecto —obra pública, APP o “inversión privada”—. Además habrá hitos de control según cada tipo de proyecto, atendiendo a criterios como el servicio público que busca brindar o el tipo de infraestructura, manifestó la Contraloría mediante un comunicado.
Esto ayudará a emitir alertas en temas como incumplimiento normativo o actos de corrupción durante la ejecución del proyecto. “Que algunos funcionarios pidan coimas para que una empresa acceda a un contrato es aún común en ciertas municipalidades y gobiernos regionales”, dice Iván Chumo, gerente general de Optical Networks, empresa de servicios de telecomunicaciones y fibra óptica.
El control concurrente aceleraría el trabajo de la Contraloría. “Antes la demora en los procesos de la Contraloría generaba sobrecostos a las operaciones”, dice Francisco Capurro, presidente de INCOT Contratistas Generales, empresa constructora peruana. Con el control concurrente se ahorraría tiempo y costos, agrega.
“Se trata de algo muy saludable. El enfoque preventivo [del control concurrente] es adecuado, especialmente en los proyectos en fase de preparación o adjudicación. Para los que ya están en operación puede funcionar en las ‘adendas’ [modificación contractual]”, dice Ramón Huapaya, líder del área de derecho administrativo del estudio CMS Grau.
Sin embargo, queda pendiente que la Contraloría delimite qué proyectos priorizará este año. “Se deben priorizar proyectos que estén en proceso de selección o diseño. En ese momento el control concurrente es más efectivo, pues aún no ocurren los desembolsos más importantes”, dice Luis Miguel Yrivarren, socio de Yrivarren, Quiroga, Barton & de los Ríos abogados.
