El fabricante de vehículos eléctricos BYD utiliza barcos fabricados en China para su distribución global
BYD, con sede en Shenzhen, está alquilando los primeros barcos construidos y de propiedad china para entregar sus vehículos eléctricos (VE) a los mercados de exportación. Con el reciente empleo por parte de BYD de un transportador de automóviles y camiones de fabricación local, los barcos controlados por China ahora abordan todas las categorías de barcos.
BYD, uno de los mayores productores y exportadores de vehículos eléctricos del mundo, lanzó el BYD Explorer No. 1 a principios de este año para entregar vehículos fabricados por la empresa a los mercados de exportación. BYD compite con Tesla por el puesto de mayor productor de vehículos eléctricos del mundo. El BYD Explorer No. 1 puede transportar hasta 7.000 automóviles.
La entrada inicial de BYD en el mercado de buques portacoches con capacidad para más de 700 vehículos, si bien es modesta, es un movimiento estratégico significativo y marca el comienzo de un “cambio radical” en la entrega por vía marítima de vehículos fabricados en China a los mercados de exportación. Los fabricantes de vehículos chinos, los mayores exportadores del mundo, prefieren emplear buques chinos para entregar su carga.
El BYD Explorer No. 1, que funciona con GNL, es el primero de los cinco buques que ha encargado BYD; tiene opciones para arrendar dos nuevos buques más. El gobierno chino subsidia la construcción de cada BYD Pure Car and Truck Carrier, que cuesta alrededor de 700 millones de dólares. CIMC Raffles, una subsidiaria de la empresa estatal China International Marine Containers, construyó el BYD Explorer No. 1 para Zodiac Maritime, la empresa arrendadora.
“Como el primero de la enorme flota que BYD está construyendo, ( BYD Explorer No. 1 ) refleja la ambición de la compañía de establecer un negocio marítimo que respalde su nuevo papel en el comercio mundial de automóviles”, informó MIT Technology Review a principios de este año.
Los PCTC transportan vehículos pequeños. Son un subconjunto de la flota de buques Roll-on/Roll-off que transportan automóviles, camiones y otras unidades con ruedas de mayor tamaño. Entre ellos se incluyen equipos de construcción (volquetes, retroexcavadoras), maquinaria agrícola y material militar.
Además de desplegar el nuevo tonelaje de PCTC controlado por la compañía, BYD anunció a principios de este año sus planes de alquilar espacio en siete barcos de propiedad extranjera para entregar vehículos a los mercados de exportación. Antes de la introducción del BYD Explorer No. 1 , BYD alquiló buques con bandera japonesa, coreana y escandinava para esas entregas.
BYD Explorer No. 1 , cargado con más de 5000 vehículos eléctricos, completó su viaje inaugural, navegando desde Shenzhen en febrero hacia el norte de Europa. Posteriormente, ha hecho escala en puertos de Brasil e India. El objetivo de BYD es exportar 400.000 vehículos eléctricos en 2024, frente a los 242.765 de 2023. La empresa depende de sus barcos para abastecer a los clientes de Brasil y Tailandia, actualmente sus mayores mercados extranjeros. El Tratado de Libre Comercio entre China y Tailandia ayuda a impulsar las ventas en Tailandia.
Las previsiones de ventas de BYD pueden ser demasiado ambiciosas. Las ventas europeas de la empresa están retrasadas debido a la mayor competencia de los fabricantes locales de vehículos eléctricos e híbridos. Por eso, el exceso de exportaciones chinas de vehículos eléctricos esta primavera congestionó las grandes terminales logísticas BLG en Bremerhaven, el segundo puerto más grande de Europa en cuanto a importación de vehículos. BYD envió sus primeros vehículos eléctricos a Alemania hace un año.
Para frenar la marea de importaciones, la Unión Europea impuso en junio un arancel de hasta el 38% a las importaciones de vehículos eléctricos chinos. La UE afirma que China subvenciona injustamente a sus fabricantes nacionales de vehículos eléctricos. Los vehículos eléctricos chinos prácticamente no tienen presencia en el mercado estadounidense. Esa condición quedó garantizada cuando la administración Biden impuso en mayo un arancel de importación del 100%, frente al 25,2%. Afirma que la sobreproducción china de vehículos eléctricos de bajo coste para la exportación perjudicará a los fabricantes estadounidenses. Mientras tanto, los fabricantes chinos de vehículos eléctricos han puesto la mira en América Latina, y más concretamente en México, como principal mercado de exportación.
BYD, que está integrada verticalmente, también produce baterías de litio, autobuses, trenes y camiones eléctricos y software para controlar y conectar estaciones de transporte y energía, según el Financial Times. La empresa planea expandir la producción de vehículos eléctricos en Europa y América Latina para evitar aranceles de importación en esas regiones.
