Los equipos de atraque y amarre habilitados para datos pueden proporcionar operaciones más seguras y sostenibles

Equilibrar la seguridad, la eficiencia, la sostenibilidad y los costos de inversión de los puertos para adaptarse al futuro de la industria del transporte marítimo se ha convertido en un desafío constante. Los propietarios de los puertos están bajo presión para mantenerse al día con las tendencias futuras en el transporte marítimo, como la gestión del mayor tamaño de los buques y los enfoques crecientes de sostenibilidad. 

Mantenerse al día con estas demandas puede tener un impacto significativo en los costos, las operaciones corren el riesgo de funcionar con una eficiencia mucho menor y poner en riesgo la salud y seguridad personal, debido a la dependencia de una infraestructura anticuada y la falta de una inversión adecuada.

El impacto de estos desafíos está cambiando las actitudes hacia las decisiones de inversión de atraque y amarre y la configuración de los puertos del futuro. Los propietarios y operadores de puertos deben decidir si deben invertir en infraestructura a fin de preparar sus operaciones para el futuro, de modo que puedan manejar embarcaciones aún más grandes y aumentar el rendimiento y la eficiencia. 

Aunque son un gran costo inicial, estos cambios se traducirán en última instancia en una mejor sostenibilidad al reducir la cantidad de tiempo que los buques permanecen en los puertos y, por lo tanto, disminuir las emisiones.

Estos cambios ayudarían a respaldar el enfoque creciente en todo el sector marítimo y reflejarían el movimiento global más amplio en torno a cuestiones ambientales y cambios legislativos, como la fecha límite de 2020 para la introducción del límite de azufre de la OMI.

Idealmente, los puertos invertirían en infraestructura que duplique la tasa de descarga y reduzca a la mitad la cantidad de tiempo que un barco permanece en el puerto, pero se necesita mucho tiempo para aumentar la capacidad de un muelle y un gasto de capital significativo. Por lo tanto, los puertos están recurriendo a la tecnología para identificar áreas potenciales donde se pueden crear eficiencias, sin la necesidad de un desembolso de capital significativo.

Generando valor

Es cada vez más importante para los ingenieros marítimos definir con precisión los límites de la operación segura para varios tipos de sistemas de amarre, todo ello teniendo en cuenta el aumento del tamaño de los buques.

A medida que los barcos se hacen más grandes, también lo hace la energía colocada en las líneas de amarre. Si la integridad de una línea se ha visto comprometida hasta el punto de romperse, el impacto dentro del puerto se amplifica y aumenta la posibilidad de lesiones y muertes. Además, los viajes frecuentes entre climas globales extremos, por ejemplo, pasando del calor a temperaturas bajo cero, pueden hacer que la línea de amarre se debilite.

Al implementar más sistemas de atraque y amarre habilitados por la tecnología, esto puede aliviar la presión de los equipos de amarre tradicionales y, a su vez, reducir los riesgos y el tiempo de inactividad no planificado.  

Generando ingresos y mejorando la seguridad

Las decisiones de inversión también deben tomarse sobre la base de cómo utilizar mejor la tecnología de atraque y amarre automatizados para generar ingresos y mejorar la seguridad. Sin embargo, existen numerosos desafíos a considerar de antemano.

Como los puertos acomodan barcos con dimensiones mucho más grandes y más largas en estructuras tradicionales, los arreglos típicos de líneas de amarre ya no son efectivos, lo que resulta en configuraciones de amarre menos que ideales, lo que puede reducir la capacidad de los servicios y causar implicaciones de seguridad.

Además, ciertos factores ambientales como las olas largas y las grandes extensiones de mareas en ciertas áreas también causan problemas para las operaciones portuarias. Cuanto más grandes se vuelven los buques amarrados, mayor es el impacto potencial del calado y la oscilación en la rotura de la línea y el daño del muelle. 

Junto a esto, el tráfico marítimo internacional crece junto con la capacidad de los buques, el aumento de la congestión crea fuerzas hidrodinámicas de succión y repulsión entre los buques que pasan. Esto puede hacer que el barco amarrado rompa las líneas, provocando daños importantes en los muelles y excursiones no solicitadas de los barcos.

Es clave mirar hacia las nuevas tecnologías que se están desarrollando en torno a modelos informáticos cada vez más precisos para los sistemas de amarre. Este modelo también debe incluir validaciones y pruebas a gran escala que sean totalmente capaces de tener en cuenta tamaños de buques más grandes. 

La combinación de sistemas de advertencia con sistemas de amarre más automatizados permite un manejo más fácil de múltiples líneas bajo tensión durante todo el proceso o explorar sistemas de amarre automatizados sin cuerdas, los cuales reducen el riesgo peligroso de trabajar en el área de amarre / carga.

Existe una creciente conciencia de cómo la automatización también puede ayudar a mitigar la falta de estándares globales en torno a la calidad de las líneas de amarre. Esto incluye disparidades entre la carga de rotura mínima garantizada y la carga de rotura real, y ayuda a prevenir la división de las líneas de los barcos y los daños posteriores.

Conclusión

A medida que las actitudes continúan cambiando a favor del amarre automatizado, la industria continúa mirando hacia el futuro en busca de mayores oportunidades en medio de las nuevas demandas, regulaciones y desafíos globales. 

La integración concienzuda de las tecnologías marítimas emergentes tiene un gran potencial, como la capacidad de los propietarios de puertos de preparar su infraestructura para el futuro para manejar embarcaciones más grandes y cumplir con los objetivos regulatorios y voluntarios en materia de calidad del aire, cambio climático y eficiencia energética.

Tomar nota cuidadosamente de los problemas de envío globales comunes, pero costosos, es el primer paso para tomar decisiones de inversión inteligentes que realmente optimicen la eficiencia, la seguridad, la sostenibilidad y, por extensión, los costos a largo plazo.

Fuente : Port Technology