Perú: Sinergias entre el puerto y la ciudad para el desarrollo sostenible y competitivo

Durante los últimos años la relación puerto – ciudad ha venido cobrando cada vez mayor importancia en América Latina. Y es que el crecimiento del comercio exterior en los países de la región hoy en día no solo depende de la oportuna adecuación de los puertos a las nuevas demandas (moderna infraestructura), sino que su desarrollo va más allá, pues para asegurar su sostenibilidad, estos, deberán reorientar sus políticas y estrategias (gobernanza) hacia escenarios mucho más viables y competitivos, en armonía con el ambiente y con sus entornos urbanos y sociales.

En el Perú, las relaciones puerto – ciudad, se vienen impulsando desde la Autoridad Portuaria Nacional (APN), en su rol articulador y facilitador, que busca promover un desarrollo integral que permita una buena convivencia entre el desarrollo del puerto y su cadena logística; así como con la ciudad y las poblaciones que se ubican en las zonas de influencia portuaria.

Si bien no existe una normativa específica que recoja directamente una demanda concreta del Sistema Portuario Nacional (SPN) relacionada con integrar de manera sostenible la relación puerto-ciudad dentro del territorio, desde el sector se ha venido promoviendo la consolidación de diferentes comunidades portuarias en el país, contando actualmente con la iniciativa del Gobierno Regional del Callao para la creación de un Consejo Puerto – Ciudad, el cual fue concretado en diciembre de 2020.

Con este consejo, integrado por instituciones públicas y privadas, se articularán esfuerzos para optimizar los procesos logísticos portuarios, el espacio aeroportuario, la competitividad y productividad regional, en relación a la ciudadanía del principal puerto del país, el Callao.

A esta importante gestión, se suma el Plan de Desarrollo Metropolitano al 2040 a través del cual se vienen promoviendo procesos de urbanización con planificación territorial, y el proyecto de ‘Ciudad inteligente’ o ‘Smart City’, ambos en el Callao e impulsados por la Municipalidad Provincial de dicha localidad.

Sin duda, estas acciones representan un primer paso para impulsar la integración puerto – ciudad en el Perú, de la mano de los diversos actores, no solo de la comunidad portuaria sino también de actores sociales, culturales y estratégicos de las ciudades puerto del país.

Hacia una integración puerto – ciudad equilibrada

Como la dinámica de las relaciones puerto – ciudad son constantes – y complejas a la vez por la multiplicidad de interacciones en diferentes ámbitos (económico –

ambiental y social, por mencionar solo algunos) – el sector portuario peruano ha continuado avanzando en el desarrollo de importantes acciones que promuevan una buena integración, aún durante el actual estado de emergencia sanitaria ocasionado por la Covid-19.

En lo económico, el SPN, en los últimos cinco años, ha venido promoviendo mejoras en su infraestructura y equipamiento portuario y, hoy por hoy, viene contribuyendo en el proceso de reactivación económica del país, gracias a la ejecución de proyectos que alcanzan una inversión de casi US$ 434 millones.

En lo social, los terminales portuarios peruanos, en el marco de sus asociaciones de fondo social y de sus planes de responsabilidad social, también han desarrollado actividades para mejorar las condiciones de su entorno, como aportes a la educación; salud a través de programas de nutrición, habilitación de hospitales, plantas de oxígeno; donaciones; y más.

La APN, por su parte y desde el 2015, trabaja en la planificación y ejecución de estrategias que impulsan el enfoque de responsabilidad social e integración puerto – ciudad a través del desarrollo de talleres y seminarios sobre puerto – ciudad, equidad de género y empoderamiento de la mujer; visitas guiadas a los terminales portuarios; foros universitarios; entre otras acciones.

Durante el estado de emergencia sanitaria, una destacable medida – entre tantas otras adoptadas también por la APN – fue la aplicación de pruebas rápidas a los conductores de camiones, en coordinación con la Dirección Regional de Salud del Callao, con el fin de detectar posibles casos de la Covid-19.

Otro de los aspectos que viene siendo fuertemente impulsado es el cuidado del ambiente, un factor que se enmarca también en el proceso de desarrollo sostenible y que le ha permitido al sector portuario implementar medidas de protección ambiental en los terminales portuarios, como el cambio de metodología para el embarque de concentrados de minerales; además de la promoción de acciones para otras actividades de la cadena logística como el uso de combustibles limpios para el transporte, la disminución de los niveles de ruido, el mantenimiento de la flota de vehículos de carga pesada, entre otras.

A estos esfuerzos, se suman los trabajos de sensibilización ambiental realizados en la Amazonía para evitar el vertimiento de los residuos sólidos de las embarcaciones fluviales; y las campañas de reciclaje, limpieza de playas y sembrado de plantas desarrolladas en coordinación con las instituciones educativas del país.

Estas son solo algunas de las múltiples acciones que el sistema portuario peruano viene realizando en pro de los nuevos esquemas de gobernanza portuaria, entre ellos, el de integrar en el territorio de manera sostenible la relación puerto-ciudad.

Si bien esto aún es un tema emergente y que viene siendo abordado más bien desde una perspectiva económica, ambiental y social; en momentos de incertidumbre como el que estamos viviendo, es cuando las autoridades portuarias de la región deben reorientar sus políticas y estrategias de gestión, a fin de asegurar sostenibilidad en su desarrollo junto a la participación activa de los diferentes actores.

Fuente : APN