Más competitividad para un mejor país
Propuestas agresivas resultan indispensables para empujar decisiones de política que cierren brechas en servicios públicos y mejoren la competitividad del país, comenta Fernando Zavala, presidente del Consejo Privado de Competitividad
Por todo lo mencionado, desde el Consejo Privado de Competitividad (CPC) nos fijamos como objetivo ayudar a retomar el crecimiento del Perú eliminando las barreras que limitan nuestra competitividad. Este año ha sido intenso. Por un lado, hemos participado activamente en los nueve comités técnicos público-privados que han servido de base para desarrollar el recientemente aprobado Plan Nacional de Competitividad y Productividad, donde el 69% de las propuestas del Informe de Competitividad 2019 del CPC ha sido considerada. Por el otro, hemos trabajado en la generación de nuevas propuestas de políticas públicas que están plasmadas en nuestro Informe de Competitividad 2020.
En este Informe, además de hacer un seguimiento a las medidas de política recomendadas hace un año, proponemos y/o reformulamos 13 nuevas medidas que permiten mejorar la competitividad del país. Y lo hacemos cambiando el paradigma de análisis; para ello, repensamos los procesos desde la visión del usuario con relación al servicio público. Esto nos obliga a pensar distinto, reevaluar los procesos y analizar de qué manera podemos llegar a proveer mejores servicios públicos de calidad, más allá del trámite.
Las consecuencias de analizar diferente son inmensas: es posible tener el mismo número de APP con 40% menos de trámites/entidades participantes; es factible reducir la informalidad hasta 4% con un nuevo régimen para la pequeña empresa; en salud, al mejorar el primer nivel de atención, se puede atender hasta el 80% de los problemas de salud. Y así sucesivamente. Las medidas propuestas cuentan con un análisis concreto que permite tomar decisiones de política, algo que hoy resulta urgente.
El esfuerzo del equipo del CPC, concretado en el Informe de Competitividad 2020, muestra que estamos en la senda correcta en el reto de plantear estrategias agresivas para mejorar la competitividad del Perú. Esto último resulta indispensable si queremos cerrar las brechas de cantidad y calidad de servicios públicos. Todo ello para lograr el objetivo común que todos debemos tener: generar un mejor país para las siguientes generaciones.
Por Carlo Reátegui